En Argentina se celebra el 29 de agosto. Esta celebración se
realizó por primera vez en 1901, luego de que el Consejo
Nacional de Educación la estableciera el 29 de agosto de
1900, gracias a la iniciativa de Estanislao Zeballos. Desde
el siglo XIX se promovió la actividad forestal, siendo su
principal impulsor Domingo Faustino Sarmiento (presidente
de 1868 a 1874), quien manifestó:
«El cultivo de los árboles conviene a un país pastoril como el
nuestro, no sólo porque la arboricultura se une perfectamente
a la ganadería, sino que debe considerarse como su
complemento indispensable: ¡Árboles! ¡Planten árboles!».