Hace 205 años, 29 diputados se reunieron en San Miguel de Tucumán para concluir el proceso emancipador que comenzó en mayo de 1810.
Cada provincia eligió un diputado y finalmente, después de arduas discusiones, el 9 de julio de 1816 los representantes firmaron la Declaración de la Independencia de las Provincias Unidas en Sudamérica y la afirmación de la voluntad de “investirse del alto carácter de una nación libre e independiente del rey Fernando VII sus sucesores y metrópoli y de toda otra dominación extranjera”. De este modo, después del proceso político iniciado con la Revolución de Mayo de 1810, se asumió por primera vez una manifiesta voluntad de emancipación.